Un señor que va a embarcar en un barco

Este es un señor que va a embarcar en un barco y llevaba a su cabra.

En esto que el de la aduana le dice:

-Mire, usted puede pasar, pero ¡La cabra no pasa!

-Es que la cabra es como una hija… y viene conmigo a todas partes y…

-Que no… que la cabra no pasa.

Entonces, el hombre se va enfadado y se cruza con un amigo y le cuenta su problemita.

El amigo le dice:

-Pinta la cabra de negro y ponle un bozal y pensará que es un perro.

El hombre lo hace y el de la aduana le dice:

¡He dicho que la cabra no pasa!

Y el hombre le responde:

¡Si no es una cabra, que no ve usted que es un perro!

Y el de la aduana le dice:

¿Y los cuernos?

Y el hombre contesta:

Oiga usted! ¡Con la vida privada de mi perro no se meta!