Un hombre vuela en un globo, cuando de repente, se percata de que esta perdido
maniobra y desciende lentamente hasta que divisa a alguien en la calle y le grita:
– ¡Disculpe! ¿Podría Ud. ayudarme? He quedado a las dos con un amigo,
llevo media hora de retraso y no se donde me encuentro.
– Claro que si – le contesta – se encuentra usted en un globo de aire caliente flotando a unos treinta metros de altura,
entre los 40 y 42 grados de latitud norte y entre los 58 y 60 grados de longitud oeste.
– Es usted ingeniero, ¿verdad? Pregunta el del globo.
– Si señor. Lo soy. ¿Como lo ha adivinado?
– Es simple, porque todo lo que me ha dicho es “técnicamente” correcto, pero “prácticamente” inútil. Continuo perdido y voy a llegar tarde a mi cita por que no se que hacer con su información…
– Y usted es jefe, ¿verdad? Preguntó el de la calle.
– Si señor ¿Como lo ha sabido?
– Es muy simple. No sabe ni donde esta, ni para donde va…
Ha hecho una promesa que no puede cumplir y espera que otro le resuelva el problema.
De hecho se halla exactamente en la misma situación en que estaba antes de encontrarnos… salvo que ahora, por alguna extraña razón…. ¡La culpa es mía!.