Un campesino baja al pueblo con su caballo, y lo amarra frente a la estación de policía,
y al amarrarlo el animal se surra en la banqueta del lugar
y al verlo un gendarme le dice:
Oiga señor, yo le daré parte de esto al jefe.
El campesino le contesta:
¡Si quiere déselo todo, que a mi, no me va a servir!