No son muy inteligentes, pero son amables, y no estoy seguro de si dejarlos entrar o no.”
Dios dice, “Bueno, tenemos estándares aquí. Hágales unas preguntas sencillas, si las encuentran correctas, déjales entrar”.
Peter saluda a los hombres y le pregunta al primer tipo, “¿Dime para qué es la Navidad?”
El hombre dice: “¡Oh, oh! Ése es el momento en que nos vestimos y vamos a recoger caramelos. Es mi vacación favorita.”
“Lo siento” dice Pedro y hace un gesto al signo con la flecha apuntando hacia abajo.
Él pregunta al siguiente hombre, “¿Qué es el Día de Acción de Gracias?”
El tipo sonríe, “Lo tengo. Turquía, comemos pollo y luego abrimos todos estos regalos que se han acumulado debajo de un árbol. Celebra el cumpleaños de ese tipo. Déjame un minuto y pensaré en su nombre.
Peter agita la cabeza y apunta a la misma señal.
Luego mira al último tipo y dice: “¿Dime cuál es el propósito de la Pascua?”
El hombre se arruga la frente y cierra los ojos, pensando duro. Su rostro se ilumina y él explica, “Eso es cuando Jesús rolla la piedra lejos de la tumba, va fuera y si ve su sombra habrá seis semanas más de invierno.”