Había un pequeño niño que todos

Había un pequeño niño que todos los días iba a ver las gorras,

a la tienda en la esquina de su casa.

El niño llegaba a la misma hora que el camión con las gorras nuevas.

Este niño las veía todas, luego de verlas se regresaba a su casa.

Un día el dueño de la tienda vio al niño y le preguntó


¡Hey! ¿Qué es lo que quieres? ¿Por qué siempre vienes a ver las gorras todos los días?
El niño contesta


Es que estoy esperando a que llegue una gorra con el visor para atrás.