Marido y mujer sostienen el siguiente dialogo:
– Cariño, el médico me ha dicho que sólo me quedan ocho horas de vida. Así que te invito a que nos vayamos toda la noche como cuando éramos novios.
– Claro, desconsiderado. ¡ Cómo se nota que tú mañana no tiene que madrugar para ir a trabajar !