El representante sindical estaba informando a todos los miembros de las ventajas obtenidas en la negociación con la empresa:
-Compañeros! hemos llegado a un nuevo acuerdo con la administración. ¡Ya no trabajaremos más cuatro días a la semana…!
-¡Bravoo! -gritaron los presentes.
-¡Nuestras labores cesaran a las 4 p.m., no a las 5 p.m.!
-¡Bravo! -volvieron a gritar todos.
-¡Empezaremos a las 10 a.m. no a las 9 a.m.!
-¡Bravo!
-¡Conseguimos un aumento en los salarios de un 150%!
-¡Braavooo!
-¡Trabajaremos solamente los miércoles!
Se hizo un silencio absoluto…
Entonces se oyó una voz desde el fondo:
-¿Todos los miércoles?