Un individuo de la ciudad llega a un rancho

Un individuo de la ciudad llega a un rancho y tiene la necesidad de trabajar,

pero no sabe nada de rancho inclusive no conoce los animales, ni como montar un caballo.

Le asignan el trabajo de cuidar las chivas y al siguiente día se va al monte y cuando regresa por la tarde muy cansado,

el patrón le preguntó que cómo le había ido con el rebaño a lo que le contesta,

que muy bien pero solo un animal le había dado mucho trabajo,

porque nunca lo podía alcanzar y el patrón le preguntó que cuál era el animal en cuestión, y éste contestó:


Aquella chiquita y orejona.
El patrón le dijo:
Esa no es una chiva, es un conejo.