Iba un Atlante con su rebaño de ovejas, llegan a un cruce de ferrocarril y el atlante toma la precaución de asomarse si venía algún tren y decide cruzar el rebaño,
cuando a gran velocidad se ve venir un ferrocarril,
por más que intenta no logra pasar el rebaño completo y que le m*** casi la mitad del rebaño.
Furioso en extremo, el atlante se encamina al pueblo,
entra en la juguetería, toma un bate de béisbol y arremete contra los trencitos eléctricos que ahí estaban,
el dueño a duras penas logra detenerlo y le exige una explicación.
El atlante le dice:
A estos hay que acabarlos de pequeños porque de grandes ma*** a las ovejas,
y doy gracias de que venía de frente porque si es de lado acaba con todo mi rebaño.