En un manicomio se encontraba un enfermero, que iba hacia el jardín de los enfermos,
en eso mira a un enfermo que golpeaba a los demás,
el enfermero para tranquilizarlo lo agarra y lo empuja pero el enfermo mental cae y se ve más furioso que nunca,
el enfermero al mirarlo dice a correr y el enfermo mental lo sigue,
el enfermero corría y corría pero no se podía quitar al enfermo mental de encima,
por último, después de una hora el enfermero se rinde y dice
Ya no puedo más, es mejor que me mate ese enfermo porque sino me voy a morir corriendo.
En eso llega el enfermo con poco aire pero al mismo tiempo furioso y decide actuar,
se ve que levanta las manos con una gran furia, como a golpear
al enfermero y luego las baja bien despacio y lo toca y le dice
¡Tú la llevas ahora! Y sale corriendo.